La artista habló en Radio Gráfica sobre su primer LP, Luminaria. Las nuevas formas de consumir música y sus ganas de volver a subirse a un escenario en este 2021.
Luminaria es el nuevo desafío de Rocío Sirri. Reconocida en el ambiente de la música del oeste por su participación en Esteparia, banda de rock progresivo que entre 2011 y 2018 lanzó un EP, un disco y hasta se dio el gusto de girar con Cirse por el interior del país. Pero lejos quedaron los riffs poderosos en formato banda. Sirri se arroja de lleno en un nuevo momento musical que la encuentra más introspectiva, apelando a lo que pide la emoción reinante en un contexto particular.
La cantante se encuentra presentando su primer LP, Luminaria. Un disco que surge durante lo más crudo del encierro del 2020. “Me encontró laburando muy desde adentro, algo muy introspectivo. También rompiendo un esquema que venía manejando. Yo venía del palo del rock. En Luminaria me deje llevar”. Sirri agrega que el disco fluyó durante esos días de confinamiento social, que en las canciones aparecen las vetas rockeras que la acompañaron durante casi toda la década pasada, pero hubo también lugar para desenchufar. “Es un tutti frutti, no sin coherencia, pero busca explorar diferentes lugares y situaciones. Eso es un poco lo que somos. Somos un tema bien arriba y algo más abajo. Tiene que ver también con mis propias aristas. Es un paseo por un montón de lugares que están buenos”.
El oeste tiene una escena consolidada, fuerte. Las bandas se interrelacionan. Por eso cuando la joven artista se embarcó en este nuevo proyecto, viejos compañeros y amigos de la movida se hicieron presentes como invitados del disco. “Siguió una línea muy natural. Con Euge (De Luca, ex guitarrista de Esteparia) y Paco (Castro García) nos habíamos juntado antes de la pandemia a tocar. Ellos me iban a acompañar en varios de los shows que tenía programados. Son musicazos y nunca dude que esas violas y esos bajos tenían que grabarlos ellos. Los admiro muchísimo como músicos”.
Otro invitado de peso fue Nicolás Alfieri, cantante de Todo Aparenta Normal y compañero de vida de Rocío. “Con Nico hicimos la producción de voces. Con él había producido los singles. Es muy groso. Grabé todo en la casa de él, que tiene un home studio. Lo grabamos en una casa, algo que nunca hubiera creído posible”. Además, en el disco participan Beto Grammatico, Santiago Herrera, Emanuel Sirri, Mauro Chianea, Alejandro Clemente y Misael Hilal.
El lanzamiento de un primer disco de larga duración
Son días en los que el consumo cultural se está reconfigurando. Lo efímero le gana por goleada a las propuestas largas y conceptuales. A pesar de esto, Sirri apostó por su primer disco solista en formato clásico. “Todo el mundo me decía que no saque el disco. Que saque singles. Yo tenía ganas de sacarme el gusto de hacer un disco”. La cantante destacó que el disco le permitía apostar a un concepto más amplio, abarcativo. Reflejaba mejor el proceso en que fue creado. “Está bueno enfocarte en un single, pero tenía ganas de encarar un proyecto más grande. Un disco es más conceptual, más integral, lo siento de otra manera”.
“Yo crecí escuchando discos. Les jóvenes de ahora quizás no lo encuentren así. A mí me suena a madurez interna mía. Fue una especie de logro personal”, expresó la artista sobre la decisión de encarar su música de esta manera. Por otro lado, analizó el consumo de música en la actualidad, la pérdida del disco como forma de escuchar música, dando paso a algo nuevo. “Quizás en un futuro no sea algo con tanto peso positivo el disco. Se va a ir desdibujando como tantas otras cosas. Es parte de crecer, no es ni malo ni bueno”.
La experiencia solista
Tras siete años compartiendo banda junto a Esteparia, Rocío se encontró encarando un proyecto en solitario. Ante la consulta de una intención de volver a formar una banda dijo: “Ya probé el fruto prohibido de la carrera solista. No sé si de ahí se vuelve”. Aun así, no descartó volver a tener un grupo en el futuro, pero dejó en claro que está disfrutando esta nueva etapa que se le abrió luego de la separación de Esteparia. “Cuando uno tiene una banda, hay muchas cosas que hay que consensuar para que funcione. Si bien a mí me gusta mucho el trabajo en equipo, también me gusta poder tomar las decisiones artísticas de a dónde voy. Creo que la carrera solista te da esa posibilidad”.
Sirri explicó algunas de las diferencias al momento de manejarse como cabeza de un proyecto. “Hay muchos pro y contra. Te encontrás sola en un montón de cosas, teniendo que bancarte todo tu proyecto, tus quilombos. Hoy igual estoy feliz con mi carrera, con la gente que me acompaña. Toda esa estructura que está detrás. Mucha gente que ayuda, que me hace sentir acompañada”. A su vez recordó el momento de la disolución de Esteparia y la sensación que vino después. “Cuando nos separamos no fue una decisión mía. Fue una decisión en conjunto. Ya no había intereses en común. Algunos chicos no tenían ganas de tocar. En ese momento me encontré sola, me aterré. No fue pensada, pero empecé a componer, a hacer música. Y acá estamos”.
Lo que se viene para el 2021
“Estoy con muchas ganas de salir a tocar”. Sirri tiene un disco que llevó un gran trabajo y en el que logró un sonido interesante, nuevo. Un disco que pide pista sobre un escenario. “Vamos a hacer todo lo posible para volver a los vivos. Estar presentes. Incluso desde la virtualidad. Este disco hay que salir a defenderlo, quiero defenderlo en vivo. Si no puedo, lo haremos de forma virtual. Luminaria es un disco que se lo merece, se le puso mucho laburo”.
Más allá de su situación personal, la cantante reflexionó sobre el contexto de la cultura en general. “Es muy importante que la industria se vuelva a mover. Es muy difícil en este contexto encontrar los lugares. El lugar tiene que estar apto. Antes era más simple, las fechas salían al toque”. Con los nuevos protocolos las salas disminuyen y los costos aumentan. Pero la intención de volver a hacer girar la rueda persiste.
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