Como es sabido, la Ciudad de Buenos Aires, es una usina de arte y música. El viernes fue otra de las miles de pruebas cabales de que rock es lo que sobra y no lo que falta. Es inabarcable para cualquier cronista o periodista cubrir el mapa de la city porteña en un fin de semana, imposible de imaginar lo que sería cubrir el conurbano donde la actividad se acrecienta año a año y genera su propio público fuera del cómodo y lujoso mainstream de la ciudad.
En esta oportunidad tuve la suerte de cubrir dos bandas con las que simpatizo y vengo siguiendo desde al año pasado, entonces no me encuentro muy juicioso por una razón obvia, es imposible ser imparcial completamente.
Sin más preámbulos, en la noche del viernes me pasé por la Beatflow donde en una fecha más que interesante se presentaban Hormigas; Circus Dei y Virtual Frizz. La fecha cumplió lo prometió, hubo rock para tirar pa´arriba .
El plato fuerte de la noche era sin dudas Virtual Frizz, que desplegaron un grato show en poco más de una hora arriba del escenario. Los muchachos de Virtual laburan su sonido en vivo y te ofrecen un lindo espectáculo de su recién salido disco “De los gigantes”, valoro el laburo de un disco que parece que fue pensado para tocar en vivo pero también para el estudio.
Hormigas y Circus Dei me sorprendieron gratamente.
Pero terminado el show quedaba noche por delante y a unos 14 cuadras en Groove estaba la Fiesta Clandestina con dos anfitriones de lujo.
Marilina Bertoldi iba a abrir la jornada en Palermo, nunca la había visto en vivo tocando con su banda y la verdad que fue un hallazgo hermoso. Las texturas que labura, la importancia y la estética que le da a las violas. Me recuerda a Gustavo Cerati en algunos pasajes y a Foo Fighters , aunque las comparaciones sean tediosas tampoco se puede renegar de las influencias y ella las trasciende, toma la inspiración que provocan esos artistas pero la obra le pertenece. Otra cuestión son las letras intimistas mezcladas con esa música delicada que puede levantar un rock furioso o unas texturas de voces que se pierde en un beat electrónico. Todo esto como preludio de su nuevo trabajo "Prender un Fuego" que ya necesito ir a ver.
Después toco otro de los platos fuertes de la noche, si mi noche de recitales hubiese sido una cena y cada banda un plato, me hubiese sido imposible siquiera sentarme a comer, hubiese reventado al primer plato.
Mustafunk tendrá un problema serio de acá hasta el fin de sus tiempos, suena excelente en vivo, igual o mejor que en el estudio. Mantener esa vara a esa altura siempre es una responsabilidad que a los chicos de Paso del Rey no les parece pesar. Igual ellos parecen encontrar mas soluciones que problemas y probablemente me equivoque una vez mas!
Si bien considero que Laboro Chamanik es una joyita en estos tiempos, en la noche de Groove pasaron por temas de “Salpica” disco debut de la banda y el show termino siendo una grata noche de “viejos” y “nuevos” temas.
El problema con tanto música linda, variada, distinta y laburada es que en tiempos en donde el hit de la “tribuna” es “Mauricio Macri la pu…” necesitaremos fondos para financiar tanta alegría.