En la previa de un nuevo show junto con Ricardo Iorio, RCI charló con Walter Martínez, histórico baterista del metal nacional, en una nota que ningún metalero ni metalera puede perderse.
El proyecto solista de Ricardo Iorio está en un gran momento, previo a lanzar un nuevo disco, con varios shows por delante, el ícono del metal nacional parece haber vuelto a encontrarse con la música. Y uno de los que forman parte de esta etapa es Walter Martínez, quien supo tocar junto a Ricardo en Almafuerte y que hoy vuelve a hacerse cargo de los parches. Con un nuevo recital este sábado 18 de agosto en La Carpa del Rock, en José C Paz (Ruta 8 y 187), Walter charló con RCI sobre este momento de la banda, como trabajan cada show, como viven el día a día. Además, habló del momento del género metalero en Argentina y su carrera en una hermosa nota.
¿Cómo se preparan para la fecha de este sábado en La Carpa del Rock?
Siempre que hacemos un show tratamos de, además de estar bien ensayados, de renovar algunas canciones del repertorio de Ricardo, asique nos preparamos con unas cuantas sorpresas de temas que hemos ido eligiendo y charlando con Ricardo. Se vienen varias canciones que hace rato que la gente no escucha.
¿Cómo se piensa el armado de cada lista? ¿Los elige Ricardo o los van debatiendo entre toda la banda?
De movida Ricardo eligió unas 25 o 30 canciones para el repertorio cuando armó la banda, como clásicos de clásicos de V8, Hermética o Almafuerte. Después le vamos tirando ideas, a lo largo de estos dos años hemos hecho repaso de todo, pero siempre igual están esas perlas que la gente quiere escuchar y que piden, yo en Facebook estoy en contacto con quienes vienen a escucharnos y me preguntan si podemos hacer temas. Lo hablamos con los pibes, lo tocamos en la sala y después se charla con Ricardo y nos ponemos de acuerdo. Siempre igual tratamos de tener sorpresas, trabajamos de esa manera. Todos tenemos ganas de tocar una canción, la otra, son casi cuarenta años de carrera de Ricardo, hay mucho. Además, nos estamos guardando los temas que grabamos para el disco.
¿En qué momento se encuentra hoy la banda? Más allá de haber nacido como proyecto solista, llevan un tiempo tocando juntos
Es un momento para disfrutar, primero porque, si bien estuve mucho en esto que fueron los 15 años de Almafuerte, solo, con mi banda, para mí que me haya vuelto a llamar Ricardo fue una grata sorpresa. Y después redondear una idea, a mí me había llamado para grabar un disco solista, pero Ricardo me dijo “Mira Walter, para grabar un disco tenemos que salir a tocar”. Y se fue delineando con los hermanos López León, con Alejo y Facundo, la idea ya estaba desde el disco anterior que llamó a Joana Gieco, y el último en ingresar fue mi hermano, Rubén. De ese momento a esta parte nos divertimos muchos ensayando, tocando. Hay una mezcla de experiencia con sangre joven, mi hermano y yo tenemos 38 años tocando metal pesado.
Y ahora estamos en la mezcla de un disco que terminó siendo doble porque Ricardo fue agregando temas. Fue muy divertido, nos fuimos a la montaña una semana, estuvimos en San Rafael grabando, Ricardo decía que éramos como Black Sabbath, grabábamos de noche y de día lo pasábamos bien, íbamos a la montaña, nadábamos, comíamos asados, picadas, momentos de disfrutar entre nosotros. Todo muy familiar, al tener dos pares de hermanos como los León y los Martínez, además de Joana que desde chiquita venía a ver los shows de Almafuerte, se formó como una familia. Ensayamos mucho, nos divertimos mucho, estamos en un gran momento.
En términos personales ¿Cómo te sentís hoy? ¿Qué le dirías a tu Walter Martínez de hace casi cuarenta años?
Y, tuve la suerte de arrancar con mi hermano, pienso que tocar con un hermano hace que uno le pase fuerzas al otro, y así arrancar divirtiéndonos. Esto lo empezamos 5 o 6 amigos de la primaria y ellos estuvieron un largo tiempo, casi los primeros 10 años, iban y venían pero siempre fuimos un grupo de amigos que tenían un sueño. Sueño es una palabra gastada quizás, todos siempre apuntan a no aflojarle a los sueños, pero yo pienso que la cuota más importante que tiene un músico es pasarla bien, divertirse. Si bien las frustraciones son tremendas y hace que no todos los que empiezan tocando lleguen. Hay muchos que tienen un impasse y nosotros no paramos nunca, pienso que el secreto está ahí, en hacerlo con pasión y sinceridad. Si yo podría volver al pasado, creo que haría todo como lo hice, como lo hicimos con Rubén, no solo a pulmón, sino que nunca aflojamos. Han terminado etapas y hemos seguido rockeando y divirtiéndonos. Cuando uno no se divierte es donde empieza a fallar, cuando se lo toma como obligación. Para mí la obligación era ir a trabajar de pibe, pero era para poder sostener mis ganas de tocar, para poder comprarme un plato, un redoblante, una batería, bancar un show, y sobre todo mostrarse y no parar de tocar nunca.
¿Y como ves el ambiente metalero hoy? ¿Sos de escuchar bandas emergentes o de ir a verlas?
¡Si! De hecho, estos últimos años hemos estado tocando por todos lados con Vorax, en cada show tocábamos con cuatro bandas invitadas. Me mandan por Facebook para que escuche, acá en capital me invitan a tocar cada tanto y me aparezco por ahí. Lo bueno es eso, que se sigue renovando, que hay muchos chicos con ganas de tocar, de armar bandas, eso es algo mágico, yo pienso que no va a parar. Es de lo más lindo que le puede pasar a una persona, juntarse con amigos, tocar, es descubrir un mundo nuevo, cuando uno se sube a un escenario es muy difícil bajarle, y que aparezcan bandas nuevas quiere decir que a lo largo de estos cuarenta años no fue una moda el metal como se dijo a principios de los 80´. De hecho, era una mala palabra, parecía que éramos los malos de la película, pienso que es un estilo de música que habla de cosas importantes. El mensaje de Ricardo en las bandas que estuvo, V8, Hermética, Almafuerte, incluso en esta etapa solista, su mensaje caló hondo en los pibes. Hablar de lo nuestro, querer a la patria, siempre hemos tocado con esa onda de esas bandas. Es maravilloso que sigan emergiendo bandas bien nuestras en todo el país.