La leyenda sólo se agranda y 50 años después de dar vueltas al mundo, Ian Gillan vocalista de Deep Purple, admite que las giras, los shows y los viajes deben llegar a su fin, una verdad incómoda y más, acá.
Deep Purple quema sus últimas naves y Ian Gillan confirma de a poco su fin. Sólo un gigante del rock se acongoja cuando recuerda sus comienzos y sobre el sencillo riff de “Smooke on the Water” se esconde otra realidad. Gillan contaría después sobre esa época “Como no tenía para comer robaba galletas para perro en una veterinaria, cuando tocábamos esa canción solo tenía una camisa y un pantalón”.
Con más de 27 giras por el mundo y la barbaridad de 27 discos entre reediciones y esas choreadas marketineras llega el ocaso de la generación pionera del rock. Sobre cómo será el fin Ian declaró: “Seguiremos dos o tres años más, pero todos sabemos que no hay nada más vergonzoso que estrellas de rock mayores que hacen el ridículo sobre el escenario”