El escritor y compositor Randy Van Gelder comienza su carrera musical desde las míticas sierras cordobesas. De los videojuegos a la música y de Estados Unidos a Córdoba.
Imaginen que toda su vida fueron amantes de la música, tenían las condiciones para componer sus propias canciones y anhelaban grabar un disco. Ahora imaginen lo siguiente: terminan gerenciando la primera plataforma de juegos en línea, un camino totalmente diferente al que esperaban pero que les da fama y fortuna. Así comienza la historia de Randy Van Gelder, cantante, escritor y compositor de Echo Strike, una banda que comienza a dar sus primeros pasos en la escena y elige a la Argentina como sede para iniciar su gira.
La peculiar historia tiene un punto de inflexión en nuestro territorio, más puntualmente en Córdoba y es por eso que Echo Strike decide comenzar su gira en nuestro país. Pareciera que las sierras cordobesas iluminan a aquellos que buscan soluciones, ya que Randy llegó a nuestro país en búsqueda de nuevos desarrolladores para su plataforma y encontró la inspiración necesaria para volver a darle a la música el lugar que se merecía en su vida; al mejor estilo Luca Prodan, salvando las distancias claro está.
Randy decide vivir en nuestro territorio, se enamora de Córdoba y al mismo tiempo de la Argentina. En un viaje a Texas, conoce a dos amigos: Jonathon Broussard, baterista y productor musical que identificó el talento y la inventiva de la música que Randy estaba escribiendo y Beau Newlin, guitarrista consumado que tiene una conexión especial tocando y creando con él. De ahí sale Echo Strike, una banda emergente y con un estilo particular, que podríamos considerar electro pop, pero, mejor le preguntamos a ellos.
Randy, ¿qué te llevó a querer comenzar una carrera musical, siendo un gran empresario ya consumado?
Como emprendedor y diseñador me involucre desde muy joven con los juegos y la música. Al estar constantemente creando algo nuevo, la transición no fue difícil para mi. El problema de la industria de la música es que solo unos pocos llegan a vivir de ella. Tome la decisión de suspender mi carrera musical y seguir una carrera que me permitiera crecer de otras maneras. El éxito que encontré me ha permitido la libertad de asumir mi verdadero amor hoy en día. He sido paciente, pero ahora es el momento de tocar por el mundo.
¿Cómo se les ocurrió la idea de contar una historia en orden mediante las canciones de su disco?
Muchas de ellas tratan sobre mi situación personal en la vida. Algunas fueron inspiradas por vivencias de un amigo, en donde convive el amor y el desamor. ¡Pero nunca diré que canciones son cuales! Preferiría guardar el misterio.
¿Cómo fue grabar un disco y cumplir tu anhelo de vincularte con la música?
El álbum es una colección de trabajo increíble de mucha gente. Fue una gran experiencia. Aprendí mucho durante el proceso y realmente me convirtió en mejor músico. Me brindó mucha confianza, me di cuenta de lo que era capaz de traer al mundo.
¿Qué fue lo que más te gustó de Córdoba y por qué te quedaste?
Una suma de factores emocionales y prácticos. La diferencia horaria entre Texas y Córdoba es de solo 2 o 3 horas, el nivel educativo y de habilidades son iguales a los que me rodeaban en EE.UU. Desde un punto de vista emocional, la confianza que me genera la gente de esta provincia. Las personas con las que trabajé fueron muy profesionales y la honestidad es un pilar para mí en todo lo que realizo.
¿Qué expectativas tienen para las próximas presentaciones y para este 2020?
Estuve en el estudio trabajando en el segundo álbum, pero la banda se estuvo preparando durante meses para la gira. Cambiamos la dieta, trabajamos físicamente para poder aguantar el trajín de una gira. Dar tantos shows en poco tiempo es más difícil de lo que uno piensa, le damos todo a cada canción, esperamos que el trabajo duro valga la pena.
La historia de Echo Strike recién comienza y en su disco Honest Lies podemos escuchar sus primeros pasos, mientras esperamos por las nuevas canciones y las repercusiones que surjan de esta gira que inicia en nuestro país.