El Dr. Rodrigo Laham Cohen, profesor de Historia Antigua de la UBA y la UNSAM e investigador adjunto del Conicet, nos contó sobre la festividad hebrea del Pésaj y sus vínculos con las Pascuas cristianas.
El sábado 11 de abril, desde nuestros búnkeres hogareños de cuarentena, recibimos en el aire de RCI al Dr. Rodrigo Laham Cohen, profesor de Historia Antigua de la UBA y la UNSAM e investigador adjunto del CONICET, para hablarnos sobre la festividad hebrea del Pésaj y sus vínculos con las Pascuas cristianas. Pero quizás no todxs nuestrxs lectores sepan qué es Pésaj, así que como en RCI somos compañerxs te contamos brevemente qué significa.
Pésaj (en hebreo “salto” o “paso”) es el nombre que reciben las Pascuas en la colectividad judía, y hacen referencia simbólicamente al momento en que el pueblo hebreo se libera de los lazos de la esclavitud egipcia y emprende el famoso éxodo bajo el liderazgo del profeta Moisés (sí, el que abrió las aguas del Mar Rojo) hacia la tierra prometida de Palestina.
Ahora bien, respecto al significado de Pesaj, el investigador señaló que “Nosotros conocemos Pésaj como la Pascua Judía, aunque los judíos no reconocen el término” y agregó que “es hebreo y significa ´saltar´ y hace referencia a la última plaga de lo egipcios, según el relato bíblico, donde Dios va salteando a los judíos y matando a todos los primogénitos de Egipto. Habla de la liberación del pueblo judío de la esclavitud egipcia, esto es lo que celebra la tradición judía y que refiere a la libertad”.
En comunicación con Resistiendo con Ideas, Laham Cohen, comentó cómo se celebra esta tradición. “Durante 7 días no se puede comer nada fermentado porque dice la tradición que los judíos se fueron de Egipto sólo cuando el Faraón los autorizó, por eso no había tiempo para levar el pan y es por esto que en toda su estadía en el desierto comieron ese pan ácimo. Por eso lo más tradicional de la celebración es el pan con harina pero sin levadura, más conocido como matzá” y remarcó que “hay una celebración que dura 7 días en Palestina o en Israel. En cambio, en las afueras de Palestina son 8 días”.
“El primer día se come hierbas amargas para recordar la esclavitud, una especie de mermelada que recuerda a los ladrillos que hacían los judíos para los egipcios”, manifestó el investigador.
Frente a la historia que dio nombre a Pesaj, Laham Cohen se refirió a que “cuando vamos a la historia, las cosas comienzan hacer un poco de ruido. En la Biblia hay relatos constituidos en un momento específico muy posteriores a la salida de Egipto. Acá es donde aparecen muchas inconsistencias en los datos duros que tenemos en los registros arqueológicos de lo que realmente sucedida en Egipto y lo que dice la Biblia. No hay forma, aunque se hayan hecho intentos, en comprobar que haya judíos en ese lugar y tiempo, y en esa cantidad”.
“Cuando salen de Egipto en el siglo XIII a.C. eran 600 mil varones que se llevaban a 2 millones de personas, saliendo del Delta del Nilo, cruzando la península del Sinaí y dando toda una vuelta absurda para llegar a Jordania y conquistar varios lugares. De ese periplo no hay registros materiales que demuestren que estuvieron aglutinados bajo una misma religión. Parece una historia constituida por seres humanos para atribuir de un pasado glorioso a una sociedad que comenzó bastante después de eso”, afirmó el investigador y añadió que “nosotros nos manejamos con fuentes - piedras, inscripciones - y éstas no dicen que pueda existir este éxodo pero tiene un significado positivo que fue la liberación de la esclavitud”.
Por otro lado, hizo referencia al calendario judío y cuando se festeja Pésaj. “Se maneja por la luna y el sol. Hay un mes que se llama Nisán. No es móvil el calendario hebreo. La Pascua Judía se celebra en la primera luna llena del equinoccio de primavera” y puntualizó: “La Pascua Judía no siempre fue igual. Cuando existía el Templo de Jerusalén, que era la capital simbólica del pueblo judío en la Antigüedad y que ahora es muy polémico porque es la capital de Israel no reconocida por la ONU, pero sí por Estados Unidos”.
“Ahí se sacrificaba a un cordero en la noche del 14 y se comía matzá, pero los romanos destruyeron el templo y los judíos se quedaron sin lugar donde sacrificarlo, así que cambiaron la forma de la celebración y explicación de las tradiciones de cómo se liberaron de Egipto”, mencionó Laham Cohen.
Finalmente, habló sobre el vínculo que tiene el Pesaj con las Pascuas cristianas. “Cada comunidad celebra de distintas maneras. Los cristianos nacen a partir del judaísmo. Jesús se reconoce como judío y él viene a renovar el pacto entre dios y los hombres. Al comienzo, los cristianos festejan el mismo día y eso generaba tensiones. Por eso las Pascuas cristianas se movieron de fecha aunque a veces se cruzan cómo sucedió este año”.