Miles de artistas argentinos empiezan a buscarle soluciones a la crisis que afecta a la industria cultural. Hablamos con Hernán "El Cabra" De Vega de LMDF sobre el andar de Musicxs Organizadxs.
La industria musical y cultural es uno de los sectores más golpeados por las medidas de aislamiento social preventivo, implementadas a mediados del mes de marzo. Como a gran parte de la sociedad, una enorme cantidad de artistas sufre las consecuencias de la coyuntura actual y se les hace insostenible esta situación. Esto no es para menos ya que los shows son su única fuente de ingreso y sustento económico. No hablamos de bandas ni artistas consagrados, quienes quizás se encuentren en una situación algo más maleable, hablamos de los y las miles de personas dedicadas a nutrir la industria cultural musical, que viven del día a día y trabajan normalmente en la informalidad. Sonidistas, técnicos, plomos, personal de maestranza, agentes de prensa, son algunos de los oficios más afectados sin dejar de nombrar a toda la amplia lista de músicxs independientes, que ven mermados sus ingresos y su calidad de vida, quienes le hacen frente a una situación muy poco alentadora para los tiempos que vienen.
El rol del artista como trabajador es una disyuntiva constante. En todo el amplio espectro de la industria cultural, se desarrolla una noción del artista como un individuo enajenado del sistema, sin un acceso real a las condiciones laborales básicas de cualquier trabajador. La necesidad de considerar a todxs los trabajadores y trabajadoras de la industria musical, y poder brindarle los derechos sustantivos de cualquier laburante se convierte en una disputa eterna. ¿Cuál es la manera de darle visibilidad a esta demanda que lleva tanto tiempo siendo discutida socialmente? ¿Cuál es el rol de lxs artistas en nuestra sociedad realmente? ¿Es solamente un actor más o tiene un papel fundamental en la construcción del sentido cultural?
Bajo el hashtag #Pueblounidovalepordos se llevó a cabo el primer foro Latinoamericano de musicxs que contó con la presencia de Hernán Carlos "El Cabra" De Vega, miembro del grupo Las Manos de Filippi, como representante de nuestro país. Con la idea de considerar a Lxs Artistas como sujetos políticos, distintxs exponentes musicales de cada país debatieron y expusieron su postura en torno al papel preponderante del artista en la sociedad por fuera del arte en sí, más bien como trabajador. Esta noción del artista no es universal y se encuentra en disputa en las diferentes realidades políticas de cada país, lo que hace aún más importante dicha discusión.
Conversamos con El Cabra para que nos comente un poco más sobre la iniciativa y su participación en Musicxs Organizadxs, iniciativa nacional que cuenta con el apoyo de varios exponentes de nuestra música como Gaspar Benegas, Sara Hebe y Maikel, guitarrista de Kapanga, entre otros. ¿El objetivo? Visibilizar estas demandas que se hicieron fuertes estos últimos tiempos.
¿Cómo nace su participación en esta iniciativa y que posiciones se debatieron? ¿Qué conclusiones pudieron tejer en conjunto?
La iniciativa surge desde unos colegas de Colombia. Recibimos la invitación de los artistas por haber compartido algunas giras en el país. Se debatió más que nada el rol del artista y del arte. Nosotros tratamos de aportar el hecho de no poner en discusión lo artístico y limitarnos a poner en cuestión que el artista es un trabajador y por ende tiene ciertos derechos como tener un sindicato que brinde esas garantías por las que estamos luchando.
¿Pudieron ponerse de acuerdo en alguna acción colectiva?
Si. Logramos el compromiso de realizar asambleas nacionales e internacionales. Surge una necesidad de realizar estas asambleas para visibilizar estas problemáticas en todos lados. Nosotros llevamos las propuestas realizadas con la agrupación Musicxs organizadxs que unifican un poco el reclamo generalizado a nivel regional.
Ahora que mencionas a Musicxs organizadxs. ¿Cuáles son las demandas más puntuales que se están realizando y de qué manera?
Con músicos organizados arrancamos ni bien empezó la cuarentena. Planteamos hacer un empadronamiento de todos los músicos del país, en este momento ya somos más de 5000 artistas empadronados del todo el país. Realizamos ya cuatro asambleas en donde decidimos en conjunto los pasos a seguir esperando tener una respuesta del Ministerio de Cultura porteño.
¿Cuáles son sus reclamos? ¿Tuvieron la posibilidad de acercarlos a algún funcionario de Cultura?
Acercamos un petitorio al Ministerio de Cultura de La Nación y al Ministerio Porteño sobre diferentes ítems. Pedimos una compensación económica mientras dure la emergencia sanitaria de $30000, trabajo para lxs musicxs por medio de algún circuito de música online. Exigimos que no exista ningún despido en las áreas de Cultura, que nos eximan del pago del monotributo mientras dure la emergencia sanitaria. A su vez, exigimos el pago inmediato de las deudas que tenga el Estado (Nacional, provincial y municipal) con lxs musicxs por eventos ya realizados y un pedido de informe sobre el destino de los presupuestos de Cultura, tanto a nivel nacional como provincial.
Tuvimos dos encuentros con funcionarios de Nación y CABA en donde acercamos nuestro petitorio. El día jueves 7 de mayo se concretó una reunión en donde las respuestas fueron de nulas a insuficientes y sin ninguna contraoferta hacia alguna de nuestras demandas.
¿Cómo se vive en carne propia esta situación de no poder realizar tu trabajo?
Digamos que el universo de artistas está todo golpeado. Bandas como las nuestras, que viven de tocar todos los fines de semana lo sufre mucho, de hecho, si no tocamos un finde en épocas normales nos tiembla toda la economía. La situación es bastante dramática para cualquier banda. Nosotros hacemos hincapié en la problemática de los que más la sufren que son los músicos callejeros, quienes viven del día a día y músicos como la Orquesta Municipal de José C. Paz, que se quedaron sin trabajo en plena cuarentena, totalmente desamparados sin un ingreso.
La agrupación de Musicxs Organizadxs viene realizando una serie de recitales vía streaming con el objetivo de visibilizar estos reclamos. El domingo 19 de abril se realizó el primer festival online con una enorme convocatoria en donde participaron más de 500 músicxs. El evento sumó más de 70 mil reproducciones entre sus dos escenarios (a las 17 y a las 20) y cientos de comentarios en las transmisiones, realizadas a través del Facebook de la agrupación. A su vez, el domingo 17 de mayo se llevó a cabo una radio abierta para reforzar estos vínculos y visibilizar la nula respuesta que obtuvieron desde el Ministerio de Cultura porteño.
Musicxs Organizadxs forma parte de la lista naranja del Sindicato Argentino De Músicos (SADEM). En nuestro país existen aproximadamente veinte sindicatos de músicos pero no están nucleados entre sí. Cada uno posee personería jurídica en su ámbito territorial, por tal razón, los convenios que cada uno homologue no son de aplicación en el resto de las provincias o ciudades. Esto afecta directamente a los diferentes artistas que realizan su actividad de manera independiente, es decir, a aquellos músicxs populares que se desempeñan de manera autogestiva por fuera de cualquier contratación empresarial y motivados por sus voluntades artísticas.
El sector de la música es uno de tantos golpeados por esta realidad desgastante e insostenible en la que vivimos actualmente por el avance del COVID-19 y sus consecuencias económico sociales. Las acciones conjuntas llevadas a cabo desde organizaciones como Musicxs Organizadxs intentan visibilizar la realidad tangible de miles de artistas que, como gran parte de la sociedad que trabaja en la informalidad, se ve sofocada por una situación que no mejora y que los tiene como la última camada de trabajadores que podrán retomar sus actividades.
A pesar del gran deterioro de todo el aparato estatal y del poco financiamiento disponible a causa de la emergencia sanitaria deberíamos plantearnos si el problema es meramente presupuestario o es un problema de criterio político. La Ciudad de Buenos Aires, gerenciada por Horacio Rodríguez Larreta, hace cinco años, cuenta con el mayor presupuesto a nivel latinoamericano. Esto sumado al escándalo de la no licitación y el sobreprecio de los barbijos y la falta de participación para resolver los problemas que sufren los barrios más vulnerables de la Ciudad, con respecto a la escasez de agua y condiciones sanitarias y/ habitacionales, ponen al Gobierno porteño en una situación más que incómoda.
El rol del artista musical es único en cualquier esfera pública. Ya sea, como parte de un paisaje urbano delimitado por su arte callejero, como por su participación en eventos masivos promovidos en post de la diversidad cultural y el enriquecimiento del alma. Los musicxs son todo eso, pero también, son laburantes que necesitan ser escuchadxs para disponer de los paliativos necesarios que los ayuden a atravesar esta crisis de la manera más humanamente posible.