"Hølms fue la frutilla del postre de todos mis procesos musicales y emocionales"
- Cielo Manzi
- 30 jun 2020
- 3 Min. de lectura
Camil Hølms nos cuenta sobre su proyecto musical y el single "Mi vida Onírica".

Camil Hølms es parte de esa generación que atraviesa un cambio de paradigma constante y aún así, subsiste. La música como aliada, y su carrera como guía conforman a esta artista que propone en su nuevo corte "un viaje que siempre lleva al oyente a un trip, que lo transporta a distintos estados" . Con apenas 24 años, Camil llegó a Capital Federal desde su Neuquén natal para estudiar y aprender un poco más, sobre este hermoso mundo donde la creatividad juega un papel esencial.
En esta oportunidad, pudimos charlar con Camil acerca de "Mi Vida Onírica" el adelanto de su próximo disco. Este material, el segundo de Hølms, será un disco que contará con la participación de diferentes artistas: entre ellos, Luca Albano de Todo Aparenta Normal. Respetando la esencia del grupo, contará también con su sonido de base: un pop experimental que remite a un sonido oscuro y mestizo.
Como decíamos anteriormente, la música de Hølms nos permite realizar un viaje constante a diferentes estados. Ante esta inquietud, y sobre cómo se lleva a cabo ese proceso musical para generar tal concepto en el oyente, Camil nos comentaba que "Mucho de lo que sucede en la composición se va prestando a un juego musical, un libre albedrío de sonidos". Grabar y explorar musicalmente dentro de esta coyuntura ha de ser complicado para cualquier artista, esto nos decía luego Camil, sobre cómo están sobrellevando este nuevo material, "vamos haciendo un ida y vuelta (con el productor, Fernan Mareque) del desarrollo de la canción, en el contexto de pandemia se complica el hecho de juntarnos así que todo es a distancia, pero logramos mantener la magia que ameritan las nuevas canciones".
Además, considerando este concepto de viaje "introspectivo" debemos de tener en cuenta que Camil también tuvo un viaje que la llevó a repensarse una vez llegada a Capital Federal. El cambio de locación ha de ser una situación que no siempre suele ser fácil de sobrellevar. Pero no todo son malas noticias o malas experiencias, o al menos así lo entiende ella, quien nos cuenta que "venirme a capital federal implicó salir de mi zona de confort, dejé todo para venir a apostar por la música. Así fue como en el 2012 me vine a estudiar producción musical en la EMBA, optando también por tomar clases con diferentes profes de bajo y canto para seguir creciendo y desarrollándome".
¿La premisa? No parar de hacer música y apostar, siempre. "Me mantuve siempre activa, sesionando en diferentes proyectos musicales, dando clases y Hølms fue la frutilla del postre de todos mis procesos musicales y emocionales" decía Camil al respecto.
"Mi Vida Onírica", es una canción que nos permite soñar y vivir a la vez dentro de nuestro mundo, pero tratando de abstraernos de a ratos. Camil la compuso en un momento donde la indecisión en su vida figura como moneda corriente. Un contexto que le exigía tomar decisiones y repensarse, así fue como decide someterse en busca de respuestas frente al mundo de los sueños, donde ella considera "la fuente más completa e inspiradora". Además entiende a los sueños como algo que va más allá ya que "revelan mucho de lo que somos, lo que fuimos y lo que seremos, es abrir las puertas de nuestro inconsciente y no saber a dónde vamos a terminar, es inagotable".
Esa idea de un viaje subyacente, en donde uno se aleja de lo que es para encontrarse en otro lugar es la base de todo ideal donde Camil plasma "Mi Vida Onírica". Ella cree necesario "abstraernos y sumergirnos en un mundo creativo, salirnos de lo rutinario y terrenal, esa es la llave para escaparnos por un rato de lo que nos está avasallando afuera. Es ese surrealismo que deberíamos animarnos a habitar un poco más".

Y para cerrar, nos quedamos con la imagen de tapa. Camil nos cuenta que allí "hay dos Hølms, una que está desdoblada, disfrazada y dormida, la otra está despierta, sentada con una llave en su mano. Ella despertó en una realidad mágica y surrealista. Se permitió explorar y habitar ese lugar lúdico, ese lugar que es dual, oscuro y luminoso, que también es maravilloso pero a la vez aterrador, cuando se abrazan ambos conceptos logras tu mejor versión, unificada, reinventada, porque logró unirse a su luz y a su sombra". Avasallante e interesante por donde se lo vea. La veta de Hølms parte de ahí, de la creatividad y la música como respuesta ante un mundo que invade pero no contempla todo lo demás. Entre todo eso, está la música.