Sabot nos regaló un show vía streaming diferente y plagado de originalidad.
Desde ya hace algunas semanas que las calles y las redes se vieron empapados de carteles y publicaciones llenas de misterio. “Sabot ha muerto, último show desde el futuro”. Mensajes que ante un ojo poco atento generaban incertidumbre y curiosidad se convirtieron en una excelente estrategia de captación para promocionar lo que sería su primer show vía streaming realizado el pasado jueves 10 de diciembre.
Si bien pasaron varios días y en términos periodísticos la primicia pasó, nos pareció mucho muy importante resaltar algunos aspectos de esta perlita audiovisual tan bien elaborada por Sabot. Sobre todo si pensamos en todo el laburo que demanda llevar adelante una producción de esta índole, en tiempos de pandemia y después de lo que significó este fatídico año para todas las bandas que se sostienen autogestivamente en la escena del under nacional.
Lo cierto es que esta banda de amigos oriundos del oeste, donde está el agite, supo llevar adelante una propuesta alternativa para paliar el alejamiento de los escenarios y lo hizo de forma original; lejos de los shows vía streaming ya tradicionales para esta época del año.
Diferente porque se trató de una pieza audiovisual que tenía como hilo conductor una narrativa distópica sobre un futuro conspiranoico al mejor estilo George Orwell, en donde el Ministerio de Selección Natural y Control Demográfico intenta imponer sus ideales sociales tradicionales erradicando toda expresión musical de la faz de la tierra.
Esta misma idea fue presentada con anterioridad en el estreno de su último corte "No Puedo Bajar", el cual promocionaron entregando sobres con pastillas de goma junto al link para escuchar el tema.
Desde su Búnker de la Resistencia Sabotiana, la banda realizó un show acorde a esta idea Orwelliana utilizando diferentes recursos audiovisuales que nutrían el relato encastrando su música perfectamente dentro de la estructura narrativa con un repaso por sus canciones más icónicas.
"Fusilarlos" es la canción elegida para darle inicio a este show conceptual, dejando entrever toda esa mística de fogón frente al lago que los va uniendo dentro del bunker para derribar los muros de ese sistema de persecución llevado adelante por el Ministerio. Automáticamente suena “No puedo bajar” e irrumpe con esa calma fogonera para meterle chispa a esta declaración de resistencia que termina perdiéndose en una toma de 360° ante la mirada del mensaje propagandístico del Ministerio.
Luego de ese mensaje persecutorio que atentaba contra la presentación de Sabot entra en escena “Falta vida”, canción de su último EP Non Tempus, la cual lograron enganchar con una joyita re versionada de Sui Generis como “Instituciones” en donde se pudo apreciar los amalgamados recursos vocales de todos sus integrantes.
El Ministerio perdía la cordura en un nuevo comunicado y vociferando el hackeo de la transmisión la banda nos adelantaba un tema inédito llamado "Patio Rojo", el cual seguramente forme parte del próximo disco, y culminaba su presentación con “Historias 24x365” haciendo alusión a esa sensación de apatía y auto vigilancia generada por la tecnología y las redes tan característica de esta época.
Sabot retrata fielmente esta idea de resistencia y la plasma de lleno en su show conceptual dejando entrever algún que otro tema socio político actual en la narrativa de un concierto brindado desde el futuro.
Un show diferente a cargo de una banda diferente, que apuesta fuerte a una difusión original, inteligente y conceptual para sostener su música, demostrando estar más vivos que nunca y preparando nuevo material.
Hay Sabot para rato.