La banda habló sobre su nuevo sencillo, “El Camino”, su momento musical y la experiencia de trabajar junto a Daniel Melero.
Bardo Thödol es una banda difícil de encasillar. Se podría decir que es una banda de rock, pero sería reducirlos a una expresión más acotada de lo que realmente proponen. Con una musicalización cargada de mixturas y colchones sonoros, nacidos de la improvisación y la zapada pura, el grupo nacido en 2017 busca consolidar su lugar en una escena que pide cada vez más para destacarse entre las playlist de Spotify y las elecciones de shows a los que acudir. En charla con RCI, en el patio del Morrison Club Cultural, la banda comentó como llega a este tramo final del año. “Este último tramo nos encontró medio parados. Estamos focalizados en las grabaciones y canciones nuevas”. Además, luego de perder a su batero, Bardo Thödol atravesó una serie de shows con cesionistas. Con la pandemia, se enfocaron en resolver este inconveniente. “Aprovechamos el ínterin sin recitales para incorporar un baterista estable y encerrarnos en el estudio a grabar y ensayar. Era muy necesario ensamblar al baterista. Empezar de nuevo llevó unos meses de conocernos”.
Con un nuevo baterista firme, el sonido y el vínculo con el artista cambia. “Cuando uno es sesionista se vincula de una manera con la canción. Cuando uno está en su propio proyecto se vincula artísticamente de otra manera. Ahora desde el sonido se siente a un batero queriendo sumar arte a lo que somos nosotros como banda”, destacaron como uno de los importantes cambios del último tiempo.
Su público
Teniendo en cuenta su particular sonido, Bardo Thödol aclaró cuál es la búsqueda artística de la banda. “Apuntamos a expresar lo que tenemos dentro. No lo pensamos en función de cuanta gente le gusta. No hacemos temas para pegarla, lo que nos está pasando es lo que expresamos con los instrumentos y las letras. Sabemos que tenemos un sonido poco clásico, aun así, a veces sucede. “El Camino” es bastante más clásico”, agregaron sobre su último sencillo, lanzado el pasado 26 de noviembre.
En continuidad con las diferencias entre sus canciones, los músicos expresaron: “Buscamos hacer algo que nos llene. Algunos tienen un corte más comercial, otros son más complejos. Al arte uno le tiene que dar tiempo, no esperar que sea un cliché que me quede en la cabeza”. E hicieron especial hincapié en el valor de la honestidad musical. “Ser genuinos genera una conexión con gente que es consciente de lo que hacemos”.
El Camino
Su más reciente lanzamiento, “El Camino”, fue presentado el viernes 26 de noviembre. Sobre la elección de esta canción para salir a las redes, la banda comentó: “Teníamos una lista con 20 canciones, se las pasamos al baterista para que las aprenda. Cuando escuchó “El Camino” dijo que era la que le gustaba, le dimos pelota y salimos con ese”. Y agregaron sobre la esencia de este nuevo sencillo: “Somos de zapar mucho en los ensayos, venía saliendo mucho Groove, mucho funk. Este tema salió de esa manera. Por eso decidimos confiar en este momento de la banda”.
La composición
El grupo también se explayó acerca de cómo se dan los procesos de composición de su música. “Es algo que se va modificando constantemente. Al principio laburábamos con maquetas e ideas pre armadas. Luego partimos a enfocarnos en las zapadas y los ensayos. Se va renovando. Hoy es una mezcla de ideas pre concebidas y lo que surge en el momento”.
Bardo tuvo la oportunidad de trabajar con Daniel Melero en la producción de su último disco. Eso generó un intercambio que la banda sigue aprovechando hasta el día de hoy. “Él nos propuso hacer una grabación de una zapada, es medio brujo. Partiendo de esa experiencia, tuvimos una de cuarenta minutos que nos sonó casi a un disco. Lo que viene va a ser eso”.
Finalmente dejaron en claro que buscan generar a partir de este momento particular del grupo. “Lo que se genera con la banda tocando es a lo que más le estamos prestando atención ahora. Estamos grabando los ensayos, porque uno cuando toca a veces no se da cuenta de todo. Al poder escucharlos de nuevo podés sacar cosas”.
La experiencia junto a Daniel Melero
Consultados por el trabajo junto a Melero, los artistas destacaron la capacidad de lectura que tiene el reconocido músico nacional. “Es una persona que te sabe sacar la ficha de en qué momento artístico estás parado. Es disruptivo, te saca de la zona de confort. Te hace repensar todo lo que tenías concebido. Es un brujo, te lee la cabeza y te encamina”. Resaltaron lo positivo de grabar con un músico con semejante recorrido y agregaron respecto de los cambios que propone: “Después de escucharlo, entras al estudio y un poco no sabés que hacer. Lo que surge de esa confusión es la premisa que nos deja como artistas”. Además, resaltaron lo informado que está del presente musical y su conocimiento artístico. “Tiene una cantidad de data alucinante, es muy enriquecedor hablar con él. Te pregunta que estuviste escuchando, y te recomienda veinte bandas en esa línea. Es increíble”.
Proyección 2022
Pensando en lo que se viene, Bardo Thödol continuará lanzando una serie de canciones que se encuentran en el tintero, pero se animaron a clarificar un poco más el panorama. “Vamos editar el último trabajo con Daniel Melero. Avanzar en unas veinte canciones que tenemos para lanzar durante todo el año. Queremos sacarnos de encima eso para dejar esa mochila y pensar en un futuro”. Y sumó sobre los shows en vivo y lo que han aprendido en estos años: “Antes la premisa era tocar en donde sea. Ahora estamos un poco más minuciosos, pensando cuando y donde. Nos copa juntarnos con bandas que hacen otros estilos, es enriquecedor”.
Con la premisa del arte como una creación genuina, y no como una búsqueda de estribillos gancheros, Bardo Thödol prepara un 2022 poderoso. A los sencillos prometidos se le suma una zapada sugerida por Melero que promete. Pese a un presente de música ligera, algunas bandas siguen apostando a parar la pelota y darse un rato para sumergirse en propuestas más que nos corran del eje.
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