Sabot se presentó el pasado jueves en el Auditorio Oeste, en lo que fue la segunda fecha de “Vivo En Tránsito”, una movida organizada por la radio “En Tránsito FM 93.9”.
Cortar la semana un jueves, a minutos de que comience el finde, es un acto de bien. Sobre todo si sobre el escenario del Auditorio Oeste se presenta SABOT.
Cada vez que tengo el placer de ver a estos muchachos confirmo aquella reconocida estrofa de “El 38”, entonada por Ricardo Mollo: “En el oeste está el agite”. Pero no caigamos en reduccionismos clásicos eh. No hablo del agite de cancha propiamente dicho, sino de aquel que te genera internamente escuchar una banda tan versátil y talentosa.
En épocas donde el esparcimiento y las movidas culturales comienzan a recobrar la tan ansiada normalidad de aforos y libertad de organización, el Auditorio Oeste es sin dudas uno de los lugares más cómodos para disfrutar de un buen show. Amplio espacio, excelente ubicación a metros de la estación de Haedo y una barra accesible para el bolsillo de la dama y la cartera del caballero. Por este recinto pasaron grandes bandas reconocidas y hoy ese privilegio fue para los pibes de SABOT.
Así, enmarcados en la movida organizada por la radio FM En Tránsito, la cual había sido pospuesta ya dos veces, y acompañados por una hermosa noche primaveral, la "resistencia sabotiana" se calzó sus instrumentos y los mamelucos, al mejor estilo La Casa de Papel, para demostrar que el naranja le queda perfecto a su estilo de rock versátil. Algo así como Orange is the New Rock.
Corrían las 22:30 y mientras la gente no paraba de ingresar, en el escenario sonaba Cinemarte, banda que acompañaba la movida en cuestión. En su corto pero variado repertorio, Sabot incluyo temas de todos sus EPs, un estreno, y hasta se dio el lujo de hacer un cover de Charly García.
Sobre el Auditorio Oeste creo que no hay mucho que agregar. Un recinto del oeste con bastante historia. Pero si por esas casualidades nunca pisaste el oeste, te cuento que su acústica y su gran salón puede albergar a unas 1000 personas aproximadamente.
"Lujo estéril", de su disco Desde el Desconcierto Metafísico, fue el elegido para darle inicio al show a puro machaque de cuerdas. Mientras el público se acomodaba en sus asientos y sin tiempo para titubeos continuaban con "Historias 24/7x365", publicado en su último trabajo Non Tempus. Una sátira de la hiper conectividad con un corito pegadizo al final.
Con "Marfil" se abre ese abanico de melodías progresivas en donde claramente se plasma mejor su estilo, y que se complementa con un combo preciso y dinámico de vaivenes musicales en "Escribiendo Todo lo que Pinta".
Pequeña pausa, saludo al público y pum. Clavan un enorme tributo a Charly García con "Necesito tu Amor". Ahí nomás, pegadito, un estreno inédito: "Capsulas Fatídicas", una canción al mejor estilo The Strokes con un riff pegadizo que aún no tiene fecha de estreno oficial.
Llegando al cierre, y de la mano de "Patio Rojo", se gestó ese momento único de ida y vuelta entre el público que todo músico anhela: el tarareo de un riff propio. Esto se suma a la carga social y emocional que contiene la canción con el sentido de pertenencia hacía los espacios culturales que supieron, y saben, cobijar a una gran infinidad de músicos de la escena under.
La jornada hasta el momento era increíble. Primer presentación en el Auditorio, un set list impecable, pero le faltaba power. Y ahí estuvieron "No Puedo Bajar" y "Yambis". Dos canciones poderosas y estupendas para que Sabot saque a relucir todo su potencial rockero y cierre una noche para el recuerdo.
Reitero y confirmo. Estos muchachos tienen mucha tela para cortar y lo demuestran en cada una de sus presentaciones.
Si andan por Caseros el sábado, pueden pegarse una vuelta por la plaza ubicada frente a la estación y disfrutar de una sesión sabotiana gratis y al aire libre a las 17 hs. Y les tiro un adelanto: si se quedan con ganas de más, me dicen por cucaracha que en diciembre cierran el año en la capital.
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